En este lugar podrás degustar producto fresco de buena calidad. Se recomienda reservar. Dispone de salón y terraza con unas maravillosas vistas. Existe una amplia carta de vinos. Las raciones son abundantes así que no llegamos al postre.

Para empezar llegamos tarde a comer , eran las 15:05 y todos los restaurantes ponía hasta las 15:30, después de preguntar en dos , fuimos a este , preguntamos si podíamos comer y gracias, nos dijeron que sí. Por este detalle ya se llevan las 5 estrellas, pero al final se las ganaron por todo lo demás, situación , atención y calidad de la comida , tanto en sabores como en presentación. El local: situación inmejorable con vistas al mar y con una decoración marina, mesas cómodas y un buen gusto. La atención, muy buena y servicial. La carta, nos dieron unas notas escritas a mano con todo lo que tenían,esto ya te da una idea de que el producto que tienen será fresco , la carta es amplia tanto en pescados como en carnes , así como entrantes. Decidimos pedir una ensalada de burrata. Ceviche blody mary y una paella negra de sepia y gambas. Preguntamos si podíamos pedir la paella, por la hora que era , y lo dudaron. Cosa que dice mucho de su profesionalidad de atender a los clientes. La ensalada estaba buenísima, el sabor era buenísimo , que parecía que se quedaba corta , con ganas de comer mas , pero creo que eso es lo bueno , que dar con las ganas de volver. El ceviche impresionante con una presentación muy buena y una explosión de sabores en boca El arroz pues muy bien , pedimos para dos y nos costo terminarlo, estaba buenísimo. El postre solo pedimos uno para compartir, pedimos el pudin de datiles, muy bueno. En general , casi nos quedamos sin comer y fuimos a dar con uno de los mejores sitios, creo que el mejor que he ido en Menorca, Supongo que en temporada alta se tendrá que reservar mesa. Lo recomiendo totalmente , vale la pena.