Lo primero que destaca de la carta de Isla Sicilia son lo diferente de sus pizzas. Lejos de las comerciales barbacoa o bacon y queso, realiza combinaciones originales, aunque también hacen sitio para las tradicionales 5 quesos, jamón y queso o la carbonara. En nuestro caso nos trajeron la pizza Paolo e Francesca, con crema de calabaza, mozzarella, grana padano, tomates cherry y panceta; y la Lujuria, con crema de pistacho, carpaccio de pera, grana padano y parmiggiano, una opción clásica y otra atrevida. En ambas hay que subrayar que lo que más nos gustó fue la calidad de su materia prima. Desde la masa hasta los quesos, pasando por la carne o las verduras, todo tiene un gusto fresco italiano. La primera pizza estaba riquísima, con sabores balanceados entre lo salado de la panceta y lo dulce de la calabaza, un equilibrio que también aportaba el tomate a la mozzarella y al grana padano. En cuanto a la segunda, la singular mezcla de ingredientes nos sorprendió gratamente, con una pera y un pistacho crujiente que combinaban perfectamente con el fuerte aroma del queso. Además de las pizzas, tuvieron el detalle de incluir en nuestro pedido dos coulant, uno negro y otro blanco, que nos dejó un gran final, todo ello regado con dos cervezas también ‘made in Italia’, como el resto de la velada. Más críticas sobre restaurantes de Pamplona en nuestra web.