Enamorada de este restaurante me declaro .Vimos el atardecer en el templo de Debod y nos fuimos a cenar a Pepe Nero que tiene una terraza maravillosa Comenzamos con un antipasto de la casa, buenísimo, productos de calidad, más italianos que los propietarios y enorme, ya preveíamos que íbamos a comer bien y muuucho Continuamos con una burrata pugliese con tartar de salmón, simplemente deliciosa, podría comerla a diario Fuera de carta había alcachofas con gorgonzola y gratinado de parmesano, mamma mia,ñ Y para terminar, pizza Pepe nero, con Mortadela de bologna y trufa, qué locura, estábamos llenos pero no podíamos parar de comer qué pizza, qué masa. De remate, tarta de zanahoria, de queso y tiramisú casero. Ana tiene unas manos especiales para los postres, el tiramisú es una delicia. Los propietarios son grandess profesionales, muy atentos y agradables. Gracias por el cariño con el que nos tratasteis. Esta pareja de sicilianos lleva 4 años en esta ubicación y 10 en el barrio, ¡normal con la cocina que tienen! Tienen una terraza y han abierto junto a su restaurante un anexo donde celebran eventos y que han decorado muy a lo italiano, con vespa incluida Venimos enamorados del Paseo del Pintor Rosales, qué cantidad de terrazas y bares a probar