Fuimos mis amigos y yo a este restaurante en el centro de Madrid a comer. La comida fue excelente, gran variedad de platos cocinados al momento. Los postres magníficos, recomiendo la tarta de zanahoria. Y por último la atención espectacular, nos quedamos hablando con David que es un camarero encantador. Si queréis comer a buen precio, con una atención increíble y quedaros llenos, ya sabéis, venir aquí.
Estuvimos comiendo el domingo y salimos muy contentos. La comida estaba muy buena, la ración de pollo abundante (la de cerdo normal) y la atención excelente. Gran trato de los empleados, cercanos y atentos a pesar de la de gente que había. Servicio rapido. El sitio limpio. Había ruido, que es normal porque estaba lleno. Repetiría sin dudarlo y probaría otros platos a ver qué tal, pero esta primera vez ha sido excelente.
Fuimos de casualidad , cuando en la calle un chico morenito nos hablo del sitio y nos acompañó hasta allí . El sitio super fresquito y cómodo , la comida bien y correcta , todo estaba muy rico . Voy a destacar la amabilidad y simpatía de los camareros y camareras , destacando la simpatía de David , (creo que se llamaba así ) nos trato muy bien y nos informo de muchas cosas . Un saludo y volveremos .
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