RAMON QUINTANA JOLONCH
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Pues, lo he visitado para hacer un descanso en el camino de la visita por la Serra de Tramontana, antes de visitar el Santuario de la Virgen de Lluc, y he también comido un buen menú diario al precio de 18,00€ con café incluido, y doble de cerveza, que no me lo he podido acabar de la cantidad servida. Comida normal de restaurante turístico, pero bien atendido, y aconsejado por los dos camareros que me han tocado. Está situado al final del aparcamiento de pago que hay para visitar el Santuario, justo al lado de la Font Cuberta, que de ella toma el nombre el restaurante. Importante saber que disponen de una buena terraza con sol y sombra, y es muy menos concurrido que los otros restaurantes que hay en el Santuario, en la entrada y en su interior...
Podéis ir, y seguro que no os defraudarán...
Sitio informal, típico de pueblo y acogedor, atención buena por parte del camarero.
Precio moderado, aunque ligeramente más económico que los escasos restaurantes de alrededores.
Cuidaría más el detalle de la mesa auxiliar, estaba algo desordenada y es lo primero que ves al mirar la carta que esta justo a la izquierda al entrar al local.
Me hizo gracia que no nos sirvieran pan con all-i-oli, aceitunas o algo mientras esperabamos lo que pedimos, ya que estava ya preparado el platito para picar, aunque fueron relativamente rápidos.
Generosas raciones y el entrecot estaba muy bueno!
Excelente ubicación y excelente menú; platos muy abundantes de comida tradicional mallorquina. Trato del personal excelente.ideal para familias
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