Fuimos a cenar de tapas un sábado y nos atendieron rápidamente y sin reserva.
El dueño un encanto, muy amable y cercano. Servicio súper rápido y comida casera y deliciosa. Lástima no tener más hambre y más días para probar más cosas. Repetiremos si volvemos a Barcelona. Las zamburiñas de las mejores que hemos comido, y las hemos comido en muchos sitios de España, sabrosas, jugosas, frescas....una delicia.
Restaurante tradicional de los que ya no quedan, decir que desde que tengo 4 años he sido asiduo y aunque ahora no voy tanto porque ya no paso tanto por el barrio, creo que incluso ha mejorado su oferta. Miguel siguiendo la tradición de su padre Domingo siempre han apostado por un trato cercano ,familiar y comida de gran nivel a precios más que razonables. Felicidades!
Un lugar muy acogedor, con un servicio excelente y la comida muy buena.
Comiendo entre semana. El menú a muy buen precio.
El camarero/dueño (Miguel) super simpático. Tiene un trato muy campechano y muy atento con los comensales.
Los platos muy ricos! Enhorabuena a los cocineros!
El único punto a mejorar bajo mi punto de vista es el hecho de que tengan máquina tragaperras. Creo que no les hace falta y desvirtúa un poco la imagen acogedora del local.
Volveré siempre que pueda. Enhorabuena porque es muy difícil tener algo así!
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