Paramos a tomar café y tarta.
Lugar muy agradable.
Como el comedor estaba lleno nos tomamos la consumición en la terraza. Estuvimos muy agusto.
El trato del personal es exquisito, igual que la tarta de queso y el brownie.
Precio elevado ( 2 cafés con leche y 2 postres 15€).
Los baños muy mejorables.
Buena experiencia, recomiendo reservar antes porque es un lugar pequeñito y para asegurarte es mejor ir con reserva. Carta no muy extensa, pero suficiente, porque todo está muy bueno. El queso a la brasa delicioso y la sepia a la brasa buenísima, de los postres recomiendo la tarta de queso, me ha encantado. El espacio es pequeño pero acogedor, el personal es muy agradable y simpático.
Miguel Ángel Morente Romero
+5
Pequeñito restaurante ideal para hacer un alto en el camino. Después de visitar este precioso pueblo nos encontramos con este bar, perfecto para comer comida casera con una atención fabulosa. Platos típicos de la zona a un precio justo. Muy recomendable.
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