nos ha gustado mucho el local. Para pedir platos, tienes que hacerlo de 10 en 10.
Contras: mientras esperábamos el postre, bajé al baño y cuando volví, se habían llevado mi botella de agua, la cuál todavía contaba con 4 dedos de agua.
La comida: Tienen diferentes tipos de sushi al estilo de aquí, que están bien buenos y son de gran tamaño.
En platos como pollo al limón estaba súper bueno y blandito mientras que el hecho con salsa teriyaki estaba más duro y no parecía esa carne.
Buena relación calidad/precio si vas entre semana. Es la segunda vez que venimos y en general estamos contentos, aunque pensamos que la calidad ha bajado un poco repecto a la anterior vez que estuvimos aquí y teniendo en cuenta que pagamos casi 20€/ persona por el buffet libre (entre semana son 14€) pues esperábamos más. El sushi está increíble, aunque el sashimi debería ser más gordo, es muy muy fino y los platos más elaborados, ricos pero pequeños (aunque es cierto que puedes pedir las veces que quieras). Mencionar que cuando pides muchas veces seguidas empiezan a ignorarte y pasar menos por tu zona así que mejor pedir más cosas en menos veces (entiendo que ellos ganan dinero con los pedidos a domicilio y las bebidas que pides en el buffet, que las cobran a parte, pero sus reglas son que puedes pedir las veces que quieras mientras no dejes nada de comida y si la dejas te la cobran, lo cual me parece bien, pero no parece que les haga mucha gracia que pidas muchas veces).
Todo excelente, servicio rápido y con buena atención. El ambiente selecto y tranquilo.
Sobre todo la comida, los platos están SABROSOS. Me ha encantado el nigiri de unagi y la sopa agripicante, los otros platos, sin duda, también están deliciosos.
100% recomendable para venir con amigos o familia en cualquiera ocasión, ya que el precio es muy económico.
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