Me llamó muchísimo la atención la decoración del local. Fue como volver a mi niñez y a mi adolescencia. Es todo un museo con muy buen gusto.
La comida estaba toda muy rica. La atención del camarero fue estupenda. Muy atento, incluso nos dijo que pidiéramos música que nos gustaba.
Incluso nos mod
Local ambiente totalmente de los 80', personal atento y amable, comida riquísima y con buen servicio, te transporta a los años 80 y todo amenazado con los una estupenda música , si vienes a Vigo imprescindible que lo visites, quedarás encantado , totalmente recomendable.
Si quieres recordar aquella época dónde fuiste feliz y no lo sabías... tienes que ir a éste local....
La verdad que nos lo encontramos por casualidad y paramos allí a tomar algo y fue todo un acierto.
Es un local ambientado en los 80 aquella época que ahora muchos recordamos con nostalgia, tienen to
Fantástico lugar con ambientazo para conocer (o revivir) la movida viguesa y toda la década de los ochenta en general. La decoración es espectacular y está hecha con mucho mimo. Por si fuera poco, de precio está muy bien, y el personal no puede ser más agradable. Si viviésemos en Vigo, sería nuestro
Una cafetería q te hace retroceder en el tiempo para recordar viendo su decoración momentos increíbles ...
Empezamos abajo ,sentadas en un sofá tomando algo cómodamente y luego conocimos la parte de arriba con una decoración única y original de aquellos tiempos...Se pasó el tiempo volando y lo pasam
Un sitio agradable donde te vienen muchos recuerdos. Aconsejo ir a tomar algo y disfrutar de su decoracion. Y solo se escucha musica de los 80.
Cuando entras directamente es un regreso a la década de los 80,tanto en música como en ambiente y decoración. Pablo el propietario es muy amable y atento. Perfecto si quieres tomarte unas copas de visita en Pontevedra.
Un buen lugar para comerse su fantástica hamburguesa y/o una copa con muy buena música de los 80!
Platos con sabores excepcionales, matices que solo un profesional de la cocina puede conseguir, rodeado de un ambiente que te traslada a la infancia y a la juventud de los que aún nos sentimos: '' jovenes''. Y con una amplia carta de copas y cocteles para finalizar una muy agradable velada.
Me encanta este sitio, su decoración me traslada a mi época. La comida está muy rica, la focaccia de humus, queso y verduras en tempura está brutal, las croquetas de espinacas y acelgas están buenísimas ,y el burrito de carne también 👌El personal es muy atento y amable. Lo recomiendo 100% , volver
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