Excelente. Hago reseñas solo de vez en cuando, pero "Mi casa" se la merece. La atención exquisita y el producto de primera calidad. Con una brasa de las que quedan pocas. El calamar de potera a la brasa, los mejillones de roca al ajillo y el pincho de lechazo de primera!. Volveremos Paco.
![5]( "Recensione")
Magnífico producto y magnífica atención.
Toda la vida conocía la existencia de este restaurante pero lo he conocido en primera persona este mes. Hace unas semanas tuve una comida de trabajo y me gustó tanto que quise volver para una celebración más especial.
En ambas ocasiones pedí besugo a la brasa. Jugoso, en su punto, sabroso, están buenas hasta las patatas asadas que lo acompañan.
En mi anterior visita probé el pulpo a la brasa: también lo recomiendo.
En esta ocasión nos decantamos por unas almejas frescas: impresionantes, no es un producto barato (me explico... por lo que pagas por ellas puedes comer otros muchos platos de la carta, pero creo que la calidad hay que pagarla y en este caso mereció la pena), además merece la pena darse un homenaje de vez en cuando. El producto excelente y la forma de presentarlo de 10.
Pedimos también TarTar de bonito. Excelente, jugoso, se aprecia el sabor del buen aguacate y el excelente tomate sin quitar protagonismo al bonito.
De postre pedimos una crema de limón y un helado de nata con piñones. Buenísimos los dos.
Por último destacar el trato exquisito del personal así como sus consejos.
Dicen que no hay dos, sin tres. Así que espero volver.
Excelente servicio y calidad. Los calamares muy buenos. Los postres mejorables. El pincho de lechazo es exquisito: crujiente por fuera y jugoso por dentro. Pasamos días saboreándolo!!
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