Hoy he ido a comer con mi hermano Ángel , siempre que queremos hacernos un “homenaje “ elegimos Rausell, un restaurante con una calidad del producto , una preparación y presentación a la altura de lo que esperamos. Pedimos unas anchoas, unos chopitos a la plancha, un huevo frito con langostinos y un lenguado a la sal que estaba espectacular. Sin lugar a dudas que siempre volveremos.
Un clásico de la ciudad, no está en una calle del centro, no tienen un local bonito y moderno pero en la comida sigue siendo insuperable. Materia prima expectacular bien cocinada sin florituras pero que te pone en el cielo. Camareros veteranos, con mucho oficio y amables sin pasarse. Genial relación calidad - precio.
Referente de la gastronomía valenciana que nunca decepciona. Cena para dos en la que compartimos los siguientes platos: i) patatas bravas, corte grueso, textura tirando a blanda (patata cocida y frita o frita en en dos tiempos?) aderezadas con aceite de pimentón y coronadas con allioli (del bueno, del que sabes que lleva ajo) meramente espectaculares, tanto es así que nos vimos obligados a repetir 😊; ii) revuelto de boletus y foie, fantástico el punto semi cuajado del huevo y gran calidas de los productos empleados; iii) calamares a la romana, buena materia prima y correcto rebozado y iv) cocochas de merluza, el mejor broche para una gran cena. Altamente recomendable.
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