Como se dice en Nueva York: very well fandango. Las patatas de entrantes son muy muy recomendables, se notan recién fritas al contrario que en algunos otros locales "premium" de hamburguesas, y muy caseras, con ricas salsas y muy rica carne deshilachada. También probamos las croquetas, bien, pero sin más. Hamburguesas sensacionales. El precio es superior al de la media en Sevilla, pero lo pagué satisfecho. Rico pan, sin exceso de dulce ni exceso de mantequilla que a veces empalaga, jugoso y aguanta bien la gran cantidad de ingredientes sin desmoronarse. Carne de muy buen sabor y acertado punto, tanto las de medallón grueso como las smash. Trabajan excelentemente los quesos fundidos, se hacen uno con la carne, otro punto a favor. Gran variedad de ingredientes entre las hamburguesas de la carta, las hay para todos los gustos, incluso una que los fans del picante como yo sabrán apreciar. Las patatas de acompañamiento estupendas, como cabía esperar al probar las de entrante. Recién fritas y evidentemente caseras, te dan salsas de buena marca sin pagar si lo pides. Los postres quedan como punto a mejorar. La tarta de queso no destaca en su sabor a queso y el brownie directamente era de suspenso, securrio y casi quemado. Local muy agradable, con música jazz suave y espacioso, aunque las butacas que se suponen que son para cuatro personas difícilmente aceptan el trasero de cuatro verdaderos fans de las hamburguesas.