Buena experiencia gastronómica en un local con su encanto para cenar por las noches. Mesas sobre un césped artificial con una lámpara de luna ideal para la velada. Fui con una amiga a probar la carne a la piedra y cenamos muy bien por unos 15€ cada uno.
Las carnes se cocinan a su punto, te las sirven directamente sobre la piedra con el fuego encendido, unas pinzas y sal para ponerle al gusto.
No obstante, la carta es amplísima. Puedes elegir entrantes fríos, pescados, montaditos, hamburguesas, ensaladas, tapas variadas, etc. Nosotros pedimos el surtido de carne (que la sirven con patatas) y una ensalada. Ninguna queja.
Servicio amable, atento y rápido. Precios no desorbitados, teniendo en cuenta la calidad que se sirve. Habrá gente a la que le parezca caro y algunos platos pueden serlo, pero también es muy subjetivo. Yo lo veo bien para la experiencia original y diferente que se vive. ¡Repetiré!
Bar en la zona de Nervión, muy cerca de la Iglesia de la Sed. Tiene sitio en barra, salón interior y una gran terraza. Los camareros muy agradables, la comida buenísima. A destacar sus carnes a la piedra.
Todo riquísimo!! Como se nota la comida casera, patatas, croquetas, ensaladas, todo riquísimo!
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