Es un restaurante italiano que cuenta con entrantes, pizzas y pastas. Nos pedimos una ensalada caprese con tomates confitados mozzarella y rúcula (la idea del tomate confitado es original y le da un toque distinto. Destacar también la mozzarella, la cual estaba bastante buena). A continuación nos pedimos una pizza con diferentes tipos de verduras (berenjena, calabacín y champiñones) y condimentada con aceite de trufa. La masa de la pizza era fina y crujiente. El tomate utilizado se notaba que era de calidad, al igual que la mozzarella y las verduras utilizadas. El toque de aceite de trufa le sentaba de maravilla a la pizza.
Para terminar nos pedimos un canolo de ricotta dulce y trocitos de pistacho, el cual estaba muy rico.
Destacar también que como entrante sirven un pan casero muy rico recién hecho con masa de pizza y no los típicos picos que sirven en la mayoría de los bares y restaurantes de Sevilla.
Por otro lado, sería recomendable que contrataran a más personal para así agilizar el servicio.
Sitio tranquilo, no muy grande pero con un servicio y comida exquisito!! Chef italiano por lo que si realmente quieres comer bien, este sitio es el ideal para comer pasta o pizza
La calidad de la comida espectacular! Algunas tapas a mi parecer venían limitadas en cantidad, pero a nivel de presentación y sabor todo un lujo! El servicio muy amable y atento aunque a nivel de cocina un poco lento. La tarta de queso muy rica, pero cara para lo que es. Faltara volver para probar las pizzas! Nos invitaron a un chupito al final, que se agradece! Para repetir!
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