Comida de bautizo. El sitio es espectacular: esa patio, esa casona estilo caserío vasco... Servicio impecable. Pero sobre todo el nivel gastronómico... Un 10. Todo estaba riquísimo, todo estaba excelentemente cocinado, todo en su justo punto. Me quedé impresionada la verdad! Si puedo, volveré para ver el espectáculo de la brasa en el salón, que me han dicho que es para nota!
La gastronomía en este restaurante es espectacular. Todos los platos muy bien preparados y ricos. Se nota que los platos están preparados con mucho cariño. La atención del personal es fantástica. La carta es muy amplia. (Para todos los gustos) también menu para niños. Si te gusta la carne o pescado a las brasas este es tu lugar. El asador está dentro del comedor y en todo momento ves cómo se prepara tu plato. No te olvides de pedir de postre unos raviolis, una locura de ricos.
Las instalaciones aunque antiguas están muy cuidadas y disponen de un parque con árboles que hacen que el entorno de estas instalaciones sea una maravilla.
La calidad del producto es increíble, el servicio encantador y súper atento en todo momento, las cantidades de los platos algo escasas, sobre todo en el menú de los niños, para el precio que se paga que no es nada barato creo que deberían de poner más cantidad en los platos.
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