El local está cerquita del mar, con espacio exterior e interior.
Los camareros son atentos.
La comida es muy abundante y los sabores potentes. Han sacado todos los platos cronometrados, acabábamos uno justo a tiempo para servirnos el siguiente.
La carta es bastante variada aunque no tiene una gran extensión de pinchos, y tiene tapas ganadoras de otros años de su ruta de la tapa.
Hemos quedado súper satisfechos.
Recomendado al 100x100.
ENCARNACION ROMERO VILLAJOS
+5
Croquetas deliciosas, la berenjena muy buena, pincho de queso de cabra y tapa ganadora 2018 totalmente recomendable, lo más normalito unas patatas con huevo y jamón. Buena atención y servicio rápido, volveremos a probar otras tapas.
Fuimos a cenar sin reserva. El sitio está lleno, pero si esperas un poquito te hacen un hueco.
El pedido se hace en momento mediante un código QR para no tener que esperar a que el camarero te atienda. Muy útil, pero un pequeño inconveniente es que aprovechamos para pedir el postre que íbamos a querer después (torrija con helado), y fue el primer plato que nos trajeron 🫠. Le explicamos al camarero que lo queríamos para el postre y no nos puso problema.
Nosotros nos pedimos las patatas a lo pobre con foie y queso cabrales, deliciosa, merece mucho la pena. Probamos la croquetas, están muy ricas, acabamos repitiendo las de jamón. El tataki de ternera y una torta de solomillo con foie y patatas. La foie es clave en sus platos, riquísimo.
Nos pedimos una botella de vino y la cuenta nos salió a 60€ entre dos.
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