Restaurante en el barrio pesquero de Santander, hemos llegado pronto y había alguna mesa libre pero es recomendable reservar antes.
El servicio ha sido correcto y nos han tratado bien.
Ha resaltar de la comida la calidad del producto y el tamaño de este, y el precio, nos ha sorprendido lo barato que es.
Las zamburiñas y las almejas eran de un tamaño grande y estaban exquisitas, y los chipirones también.
Lo peor la paella de marisco, es para 2 personas y comen 4 si picoteas antes de sobra, en nuestro caso le faltaba sal y sabia demasiado a tomate.
Creo que es preferible tomar raciones ya que están bien de precio y bien de cantidad.
Buen trabajo 👏
Comimos por recomendación y la verdad que muy bien. Las rabas con media ración esta muy bien, platos muy abundantes. Comimos 3 personas por 80€, pedimos pulpo, rabas, chupitos, ensalada de bacalao, un botella de vino, postre y café. Dejo fotos jeje
Servicio atento y amable, las cantidades de las raciones son abundantes, todo lo que pedimos estaba muy bueno a excepción de la paella de marisco, que no se si fue casualidad o siempre les sale así, pero estaba muy salada, pasado el arroz, la verdad que hacía mucho que no comíamos un arroz tan pésimo, es más quedo media paella y no lo llevamos para casa por como sabía, nos ha decepcionado en ese aspecto porque por el precio que se paga esperábamos más. En cuanto al resto de la comida repito que todo estaba riquísimo.
Y otra cosilla es que el postre de milhojas no era realmente milhojas, eran dos bolas de helado con rodajas de manzana y el milhojas de toda la vida no es así.
Por lo demás todo correcto.
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