Situado en la pescadería del mercado de Nuestra señora de África, aprovechamos que encontramos un hueco, porque la zona estaba llena de gente para sentarnos a probar la comida. Tienen una carta algo diferente a los locales de alrededor que se centran más en el marisco de manera más pura. Pedimos un carpaccio de atún y ceviche de langostinos. Ambos platos nos sorprendieron mucho y nos encantaron, destacando el ceviche. Estaba en su punto justo de todos los elementos y un punto picante espectacular. La atención buena y el servicio rápido. Si te apetece probar algo diferente es una gran opción. Tener en cuenta que los fines de semana está zona se llena y es posible que tengas que esperar.
Con el encanto de comer en un concurrido mercado y la delicadeza de unos platos perfectamente elaborados. Comida de calidad y atendimiento impecable. Recomendamos probar el tartar de atún rojo con huevo y trufa. El Chef Enrique, se esmera en cada elaboración. No nos cansamos de volver una y otra vez
Sin duda, lo mejor es ir y dejarte llevar por las recomendaciones tanto de vinos como de comidas y disfrutar.
Un diez a todo el equipazo que hay detrás de 2° Centígrados, porque vaya maravilla.
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