De los mejores lugares de la isla para degustar el mejor producto local sin arruinarte en el camino.
Cocina bien elaborada, presentada y con sabores sorprendentes.
En cuanto al menú degustación, que es lo que elegimos para cenar, destacaría dos o tres platos por encima de los demás - bendita croqueta - siendo el resto de un nivel bueno. La experiencia fue muy positiva.
Respecto al servicio, aquí si que voy a poner un pero. Hasta que nos dieron mesa estuvimos esperando casi 10 minutos, ya que no quedó claro quién nos iba a sentar. Además, entre uno de los servicios del menú, estuvimos esperando casi 30 minutos. No pasa nada, ya que a cenar a estos sitios no vienes con prisa, pero cuando vienes con expectativas altas, este tipo de percances empeoran un poco la experiencia.
Eso si, el camarero que nos atendió muy atento en las explicaciones y amable durante toda la noche.
Recomendaría mucho su visita.
Es un sitio encantador. Elegimos el menú y creemos que fue la opción correcta para poder probar un poco de lo mucho que ofrecen. Cada plato era más sorprendente. La atención perfecta y el lugar mágico. ¡Gracias por la experiencia!
(En la foto solo hay algunos de los platos del menú)
Cocina tradicional tratada con cariño y muy buena materia prima. Sabores intensos y reales. Platos abundantes y muy bien presentados. Tomamos varios entrantes y de principales chuletón y fideuá vegetariana. Exquisito todo, por supuesto también los postres. Sabores espectaculares. Servicio correcto.
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