Fuimos a comer un grupo de 6 adultos y 6 niños.
Nos sorprendió que alguno de los platos menú del día son los mismos que encuentras en la carta, por lo que sale realmente más económico (si coincide el menú con lo que querías probar de carta).
En cuanto a cantidad, abundante.
Siendo 12 comensales hubo de todo un poco: escalopes, pizzas, ensaladas... todo muy bueno.
Podría destacar: las patatas fritas son caseras y nada aceitosas, la pizza hecha al momento también muy buena, los escalopines impresionantes, y la ensalada en oblea de trigo (no recuerdo el nombre) buenísima.
El menú infantil incluía un juguete, algo reseñable.
Tanto el ambiente como la atención fue muy buena.
Si tuviera que decir algo negativo, lo único que se me ocurre es las botellas de agua, que siguen esta curiosa moda que he visto en más de un sitio últimamente de poner una botella de agua "filtrada"... vamos que te cobran por agua del grifo. Aunque casi prefiero eso que los cargos por ración de pan o servicio de mesa...
Hemos ido unas 3 o 4 veces un grupo de al menos 4 personas y los chivitos y milanesas son espectaculares a muy buen precio. Las pizzas son 2x1 y aunque no sean espectaculares, están bien. Muy recomendable reservar
Un sitio muy acogedor. Fueron amables que ha poco de cerrar nos dieron de cenar.
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