Auténtico Bar de carretera. Comida a base de elaboración tradicional con productos de temporada. Huevos y pollos de granja propia. Embutidos, chacinas y carnes también artesanos propios. El cocido a fuego lento como tiene que ser. Incluso la bollería que acompaña a los postres es de la panadería del pueblo
Personal amigable y de trato excelente
Las sardinas espetadas y el entrecot espectacular, el salmorejo buenísimo, además de un buen trato y un ambiente agradable en la terraza. Coincidió que había un chico venenciado vino y ofreciendo a los clientes, un gran detalle!! Sin duda volveremos !! una buena opción para las noches de verano
Restaurante acojedor y tradicional a las afueras del pueblo con una agradable terraza al aire libre donde puedes cenar o almorzar tranquilo y muy agusto.
Servicio estupendo, muy buena atención por parte de la camarera y él dueño del bar que en todo momento estaban pendientes de que todo estuviera en orden y no faltara nada. Servicio rápido. Todos los platos que probamos exquisitos, la gamba blanca de Huelva, los espetos, pulpo a la gallega, choco a la brasa, fritura de pescado y él postre tocino de cielo. Tan buenos que no sabria decantarme por ninguno en especial. Solo comentar que le ponen mucha sal gruesa a las comidas así que és recomendable si no eres amante de la sal, como yo, que se lo comentes a los camareros. Por los demás perfecto y volveremos para seguir probando platos. Lo recomiendo.
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