Espectacular!!!! Comida buenísima, las croquetas de Cabrales brutal, el cachopo está de diez y que decir de las albóndigas.....una auténtica maravilla.
El servicio muy rápido y organizado, sin lugar a dudas volveremos más veces.
Me ha parecido un sitio muy agradable con unas vistas muy bonitas. La comida está buenísima y los camareros son muy agradables. No tardan en atenderte y a pesar de tener bastante gente son muy atentos. Recomiendo muchísimo probar las croquetas de cabrales y nueces, los boquerones y el cachopo. Aunque este último es bastante grande y es preferible compartilo. Asimismo, los postres que probamos (tarta de queso, quesada y leche frita) también están deliciosos. Es un lugar que merece la pena repetir.
Maravilloso descubrimiento. Después de hacer la ruta desde la Alameda del Valle hasta Pinilla del Valle, que es un paseo de 2 kilómetros y medio al lado del río, llegamos a esta fantástica terraza, espaciosa, con una carta extensa. Pedimos croquetas caseras, la ensalada La Cañada, secreto, migas, barbacoas de carne y verduras. Todo exquisito, no pecamos con los postres pero los veíamos pasar y tenían muy buena pinta. El café de puchero. Hay zona para aparcar, también para que los niños jueguen al balón. Solo abren desde el puente de mayo hasta mediados de octubre
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