Buena experiencia, muy recomendable por la variedad de pastelería y la absoluta calidad de sus productos, aunque local y terraza un poco pequeños.
Pastelería en la que se puede tomar café y refrescos en su local y terraza.
Lo mejor:
-Sin duda la calidad. En mi caso compré una bandeja de pasteles medianos, y hasta ahora son los mejores pasteles que he probado en Oviedo de lejos, y de los mejores de mi vida: sabor, textura y presentación de 10.
-Variedad: hay mucho pastel, bizcochos, etc donde elegir.
-Local limpio y con gusto
-Atención correcta. He leído mucho comentario malo sobre la actitud de las chicas que atienden, pero no fue mi caso: correctas y educadas.
-Precio correcto: la calidad hay que pagarla, y desde luego que los pasteles lo valen para mí- si buscas precios de bollería industrial no los vas a encontrar, pero me ha parecido el mismo precio que otras pastelerías pero con mucha más calidad.
Lo peor:
-Si hay gente te toca esperar un poco.
-Local y terraza un poco pequeños, y la terraza además tiene mucho tránsito de gente en la acera que está.
-Díficil aparcar si vas en coche.
Pastelería tradicional en Oviedo, todos sus productos son de una calidad excelente.
Lo único malo que tiene, es el espacio, muy reducido, pero si vas temprano a desayunar, serás muy bien atendido y podrás disfrutar.
Con cada café o infusión ponen una pasta casera y siempre están exquisitas.
Los precios son un poco más elevados de lo normal.
Muy bonito y bien decorado el establecimiento. Tanto los dulces, como lo salado, exquisito, variedad, bien eleborado y buena calidad. Muy limpio. La atención, muy mal, tardan en atender, en recoger las mesas y cuando traen el pedido, siempre falta algo. El personal es agradable,, yo creo que tienen más trabajo del que pueden desarrollar.
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