Estuvimos ayer cenando mi mujer y yo. Y he de comentar que somos de Madrid y hemos comido en muchos restaurantes buenos, de calidad y de muchos rangos de precio.
Pues bien, mi evaluación es de restaurante de 10. Servicio exquisito, calidad de producto inmejorable, presentación muy cuidada.
Pedimos ensalada de burrata con tomate seco y aliño de pesto. El sabor del marinado del tomate espectacular. Plato fresco y con una mezcla de sabores acertados.
Segundos, atún rojo y solomillo. El atún rojo eran bocados de una calidad y un sabor impresionante. Y la carne pura mantequilla, que para ser la costa es muy muy sorprendente, esa calidad de carne.
Postre. Lingote de oro, chocolate Ferrero Roche. Pues mira que hemos probado postres, pero este es para no morirse sin probarlo, sin paladear esas texturas y ese sabor.
En resumen, un lugar que una vez que entras te teletransportas a un mundo culinario sorprendente. Un lugar para deleitar el paladar, el estómago, y las papilas gustativas.
Precio alto porque lo vale, salimos encantados y muy muy satisfechos.
Sólo un pequeño pero, pero un chupito al final de la cena y me lo cobraron. Pequeño detalle que no costaría nada darlo como obsequio.
P.D. Las críticas al lugar no pueden ser más que de competencia que no le llegan ni al nivel del pie, porque de verdad que si se entiende algo de gastronomía es muy difícil poder criticar un sitio así.
Muy buen restaurante, los precios no son baratos pero la comida es buenísima.
Llevo muchos años yendo a este restaurante y siempre repito, también he de decir que comparado a hace 5 años a bajado un poco la calidad.
Las croquetas de rabo de toro antes estaban buenísimas y ahora saben mucho a bechamel.
No te arrepentirás de comer en este restaurante. El servicio, el ambiente, la ubicación y sobre todo, lo más importante, la comida, son excelentes.
Un gran experiencia gastronómica.
Muy recomendable!
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