Como dice el cartel al entrar. " Donde la masa y la canela se enrollaron" en este sitio solo tendrás rollos de canela de diferentes sabores. A mí me gusta el clásico, pero todos tienen una buena pinta. Viene de todas partes para probarlos.
El roll de Canela original está muy bueno, calentito y esponjoso, el resto, como el de pistacho y chocolate, no tienen el relleno en si, es solo la cobertura , por lo que hace que el interior quede más soso. Igualmente, no están extremadamente dulces o empalagosos, son más ligeros de lo que parece y en relación calidad-precio muy bien. El lugar se ve limpio y tiene ambiente.
Espectacular para probar algo distinto, la atención ha sido sobresaliente, a más teniendo en cuenta que había una cola larga y las chicas no paraban ni un segundo y seguían siendo capaces de sonreír al atenderte. El rollo estaba muy bueno y esponjoso, se puede pedir que le pongan encima algún topping más, nosotros pedimos el rollo clásico, que lleva el azúcar encima pero nos pudo nuestro cerebro de gordos y pedimos además chocolate blanco, estaba buenísimo pero empalagoso, había varias variedades pero unos 5 o 6 sabores distintos, lotus, pistacho, Nutella y kinder además del clásico y el normal. Hay unas 4 mesas dentro y 5, casi imposible pillar mesa si no estas atento a que alguien se levante. Tienen un solo baño que estaba regular al no poder atenderlo.
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