Tienen la terraza en la sombra de la arboleda del paseo central.
El dueño es muy amable. Me ha obsequiado con un salpicón de marisco.
He tomado primero una cerveza con aceitunas, luego he pedido otra cerveza y un cuscus, y me ha añadido el salpicón. Por todo he pagado 15€.
No me ha dado ticket. Pero parece que aquí es normal....
Vuelvo otro día y tomamos pastela de pollo (es un envuelto de masa brick que contiene hebras de pollo con cacahuetes canela azúcar y creo que algo de cuscús) ya me advierten que el tamaño es pequeño (será como unos ocho centímetros de diámetro) y que pidamos algo más. La pastela me gusta me recuerda a la morcilla dulce de Calahorra.
Pedimos carne en salsa que tiene carne salsa cacahuetes patatas fritas un huevo duro y aceituna. Además un pan.
No me ha gustado la carne en salsa.
El sitio es nuevo pero está de lujo. La comida riquísima. Aprovechando el mes de Ramadán pedí Harera y pastelas de pollo y estaban riquísimas! También pedimos tacos de pollo empanado y son muy completos. En cuanto al precio, bastante asequible.
El trato de los trabajadores fue inmejorable, siempre pendientes de que estuviésemos agusto y bien servidas.
Genial , la comida muy rica y el trato excelente siempre que vengo me tratan genial 10\10
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