Muy buen lugar para disfrutar de un contundente desayuno de estilo americano.
Variedad de platos salados y dulces con buenos productos y con sabores cuidados.
Destacaría las tortitas por su textura esponjosa y por su sabor.
El mayor inconveniente que en los fines de semana suele estar muy lleno y con colas enormes si no reservas.
Fui un lunes por la mañana a eso de las doce y pico y la verdad es que había gente pero estaba muy tranquilo. El local es amplio y la música muy agradable, no estaba alta. El local me ha parecido muy luminoso.
Pedimos para compartir pensando que sería lo justo para una media mañana pero ¡Vaya raciones! Gratamente sorprendida.
Nos pusieron ketchup, mayonesa ( en bote y no en sobre, cosa que yo personalmente agradezco) y un sirope muy rico. El sándwich era un grilled cheese con champiñones y pollo frito, ¡pero la cantidad era como dos sandwiches!. Nos atendieron muy amablemente y estaba todo muy rico. Quizás las patatas algo frías, por poner alguna pega... Salimos a 18€ dos personas con la bebida incluida. La carta es bastante extensa, con prominencia en la variedad de tortitas, pero tienen sandwiches, tienen de picar, tartas, dulce y salado.
Tenía ganas de probar desde hacía tiempo y por fin he podido ir 😊
Estuvimos merendando y nos gustó mucho. Comida de calidad y buen ambiente.
Nos sirvieron una jarra de agua fresquita al entrar, y la verdad que nos encantó el detalle porque hacía mucho calor.
Las raciones de tortitas son grandes y sacian mucho, por lo que aconsejo que si no tenéis mucha hambre primero pidáis un plato para compartir, a nosotras nos sobró un plato entero.
Repetiremos sin duda
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