Estuvimos tomando el aperitivo un sábado sin reserva.
Es un lugar encantador, con la esencia de Chamberí reunida en un mismo local.
No pedimos gran cosa, pero el producto es espectacular. A destacar el vermut que hacen, con un toque especial.
Pedimos la gilda (de otro planeta) y la ensaladilla, que estaba también muy rica.
En definitiva, sitio estupendo para ir con amigos a picotear algo a buen precio y de buena calidad.
Volveremos!
Nota: 8 / 10
Hacía tiempo que no tomaba un vermú de los de antes. Los boquerones una delicia también.
El camarero que nos atendió encantador, pendiente en todo momento de sí faltaba algo en las mesas, servicio muy ágil. Repetiremos seguro.
Genial descubrimiento. Tienen una carta pequeña pero llena de platos deliciosos como los boquerones, ensaladilla rusa y las carrilleras o las albóndigas. El vermut es otra de sus maravillas. El servicio fue muy rápido y los camareros muy atentos y amables. Tienen una sala, barra y también terraza. Estuvimos un jueves y el local se llenó por lo que para la próxima, mejor reservaremos con antelación.
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