Ian Gabriel Kahl Beloso
+5
Una pequeña cafetería con desayunos increíbles, crepes, tostadas....y el café de lo mejor del barrio, con leche fresca y bien hecho. Tienen un café con canela y naranja que no te dejará indiferente. Recomendado 100%.
Comida riquísima y excelente atención, 100% recomendado, variedad de crepes dulces, saladas, y bebidas, muy bueno todo!
Lo recomiendo:
Sitio acogedor. Llegamos antes de la hora de la reserva y nos dejaron sentar igualmente, no tuvimos que esperar.
Pedimos dos crepes cada uno, uno dulce y uno salado. Mi elección es la de la imágenes, aunque también probé el de mi acompañante. Me gustaron ambos, excepto el crepe dulce con fruta, ya que había una de las frutas que estaba pasada y dejaba sabor ácido en el resto del crepe.
Mi elección fue crepe salado con bacon, huevo y queso. Y de postre el crepe que lleva helado de oreo. (No recuerdo los nombres)
Cafés muy ricos a un precio correcto. Local muy bonito. Buen trato al cliente.
Comida RIQUÍSIMA, muy atentos, nos dejamos aconsejar en todo y nos encantó. Pienso volver y se lo recomiendo a todo el mundo. Me encantó el zumo de naranja y fresa.
El café y los batidos muy ricos!! No probamos las tartas ni las crepes pero tenían muy buena pinta! El personal muy simpático y es un lugar tranquilo cerca de Fuencarral donde tomarte algo. Las sillas son como las del colegio!! Muy acogedor el lugar💜
Muy muy recomendable la verdad, tanto por el trato como por la variedad de su bollería y lo ricos que ponen los cafés. Además el local está decorado con mucho encanto por lo que es perfecto para ir a tomar un café tranquilamente lejos del ruido de Malasaña con una gran música de fondo.
Un sitio encantador.
Hacen el mejor café ecológico que he probado.
Todos los postres son artesanos y con productos naturales.
El trato es familiar, y a parte.... Son encantadores!!
Con una carta muy sencilla, en la que cada crêpe tiene el nombre de una planta, L’Orangerie propone desde opciones más tradicionales (la Cica, de jamón y queso, o la Helecho, que añade un huevo) hasta otras más originales (como la Crotón, de hummus de garbanzos, rúcula y nueces, o la Alocasia, de jamón, queso crema, espinacas y piña en almíbar). Una serie de combinaciones que lo ponen muy difícil a la hora de elegir y que harán que queráis ir varias veces para ir probando poco a poco cada una de las crêpes. Y más teniendo en cuenta su precio, ya que ninguna llega a superar los 7€.
Un sitio que me ha sorprendido gratamente, tienen al principio unas mesas en un espacio pequeñito pero dentro hay un salón mas grande bastante acogedor... las crepes están riquísimas y el café bastante bueno, hay una camarera que es un encanto. Todo un acierto
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