Restaurante que cuenta con terraza y un agradable salón interior, muy fresquito y con las mesas bastante separadas, y en cuya carta encontramos una treintena de platos, con bastante variedad y unos precios razonables. Nosotros acudimos para comer y elegimos varios platos para compartir: media ración de ensaladilla rusa, media ración de fideos tostados, media ración de quesadillas de pollo cajún y una ración de chicharrones de Cai. De bebidas, una pinta de cerveza, una botella de agua y dos refrescos, y de postres, una tarta de limón y coco y una tarta de queso payoyo, para una cuenta de 42,90 € para tres comensales. En general, bien, buena atención y posibilidad de probar varios platos, que en general estaban bien; lo que menos nos gustó fue la tarta de queso, muy poco cremosa y con poco sabor, pero en general no es mal sitio.
La comida estaba buena pero la carta era muy escueta. Además no puedes pedir tapas a ciertas horas lo que te limita más a la hora de decidir. Por el precio, esperas platos más abundantes, por ejemplo el flamenquín que para su precio viene poco.
Anoche estuvimos cenando por primera vez y nos encantó .El servicio genial, muy atentos, pendientes del cliente pero sin agobiar y la comida nos encantó .Pedimos medias raciones a muy buena relación calidad/precio para compartir y nos gustaron bastante. Los fideos tostados estaban espectaculares al igual que el pulpo a la gallega.Sin duda repetiremos y muy recomendable.
An error has occurred! Please try again in a few minutes