Quien venga a Granada y no visite este templo es como si viniera y no viera la Alhambra, la calidad de sus vinos es algo excepcional y que solo es comparable con la excelencia de su comida, no es un sitio de tapas, es para comer y beber disfrutando del buen hacer de Paco con los vinos y de la buena mano de Alvaro con la cocina. Los precios se corresponden con la calidad y la exclusividad de sus caldos. Pide huevos rotos con una botella de Garnacha y te sentirás como un auténtico rey.Si tenéis la suerte de que tenga cigalas….os las pondrá con huevos fritos……Manjar de Dioses!!!!!
Un pequeño gran lugar, donde en un espacio reducido puedes probar bastantes variedades de vinos nacionales. Lugar perfecto para compartir con una buena compañía. La carrillera estupenda. Los chipirones también...y la atención de los camareros muy atenta, dispuestos a aclararte cualquier duda, sobre todo respecto a los vinos.
Para volver otra vez.
El vino esta exquisito y las raciones muy sabrosas. Las tapas no se eligen pero también están buenas.
An error has occurred! Please try again in a few minutes