Raúl Salvador del Campo
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El año pasado cenamos un grupo de amigos y ayer de vuelta por Gijón repetimos
Comida asturiana de calidad, bien servida por sus buenos camareros y bien preparada en cocina, si vas y no repites no es por culpa de ellos, su trato te hace buscarlos para volver
2 de 2 y volveremos
Buena sidra la del canal q no la había probado, los camareros buena gente y la comida buena y abundante.
Estuve ayer por primera vez y me a encantado el trato profesional que habéis tenido y al mismo tiempo familiar muy buena sidra de denominación tenias y los calamares frescos muy tiernos y deliciosos igualmente que los escalopines sinceramente para recomendar a todo el mundo ya por vuestro trato conmigo como vuestra calidad de sidra y comida nos volveremos haber sin duda alguna muchas gracias por todo a Borja por tu profesionalidad y a tu compañero también que no se su nombre
En mi opinión son gente muy agradable y te tratan super-bien, nos encanta ir a tomar sidra alli
Trato excelente y profesionalidad. Te hacen sentir que eres buen cliente nada más entrar y eso ya lo dice todo. Es cocina casera, casera deliciosa y sin tonterías. Comida abundante. Calidad/precio, difícil de superar. Muy recomendable. Volveremos seguro.
Fuimos a comer el menú del día mi suegro y yo, lo elegimos al verlo totalmente lleno.
No indicaron que en la parte de arriba había sitio y a parte de estar muy cómodos nos trataron de un modo excelente.
Los platos abundantes y buenos, de hecho incluso te dejan el pote para repetir. Los postres además caseros y muy abundantes.
A día de hoy, me parece muy un sitio muy bueno en cuanto a calidad, precio y atención
Comida muy rica, calidad precio bastante buena, buen ambiente en el local, y atención muy cercana que te hacen sentir como en casa, sobretodo un camarero que hay de barba y tatuajes muy majo!! Volveremos sin duda
Fuimos a comer entre semana, menú del día por 12€. Entrante, primero, segundo y postre. La comida muy buena y abundante, no pudimos con todo el primero. Nada mas sentarnos nos recibieron con una tapa. Tuvimos un problema con el estado de la lubina y nos la cambiaron sin problema por chipirones riquísimos. De postre no me apetecía dulce y me ofrecieron fruta fresca.
Personal muy amable.
El único pero sería el ritmo de platos, algo lento.
Repetiría seguro.
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