Tuve una buena experiencia en este restaurante. La comida era deliciosa, especialmente los sushi y el cóctel de mariscos. El restaurante tiene un ambiente acogedor y una vista hermosa al océano. Sin embargo, debo mencionar que los precios son un poco altos, lo que puede resultar un poco caro. A pesar de eso, la calidad de la comida y la experiencia en general valieron la pena. Definitivamente recomendaría este lugar para una ocasión especial o para disfrutar de una comida deliciosa con una vista impresionante.
Una decoración muy original llena de detalles con mensaje en un entorno muy acogedor junto a la playa del Medano, con increíbles vistas al mar y buena iluminación y ventilación.
Con una excelente atención por parte tanto de las camareras como de los cocineros, visibles en todo momento mientras preparan los platos.
Éramos 2 personas y pedimos:
Para beber: 1 cerveza dorada (2€), 1 caña dorada (1'70€) y un zumo natural de maracuyá (4€): muy fresquito y refrescante.
Para comer:
* Ceviche de atún acompañado de pan de arroz(11€): atún rojo macerado en una salsa lechosa tipo lima con toque de acidez,, acompañado de cebolla morada, maíz o millo tostado, manzana verde en cubitos. Una mezcla de sabores agridulce sorprendente.
* Plato de sushi para 2 (26€): muy muy recomendable, compuesto por:
- 4 piezas de sashimi de salmón: simplemente delicioso.
- 10 piezas de roll del can (alga nori, arroz de sushi, gambas, atún, aguacate, plátano macho frito, en tempura japonesa con wakame): nos encantó.
- 10 piezas de roll maki huahueño (Roll en tempura relleno de pepino y zanahoria , y coronado con mezcla de atún rojo y salmón con tobiko y salsa kimchi).
- 8 piezas de roll california (roll de alga nori, arroz de sushi, salmón, pepino, zanahoria, palitos de cangrejo, tobiko , mayo hoisin, sésamo y aguacate).
De postre: Cheesecake en tempura de mango y maracuyá (5'50€). La base de queso se derretía en boca con el crujiente de la tempura calentita, recubierto por la salsa tropical que resaltaba el sabor de la tarta de queso.
Cuidan hasta el mínimo detalle, como la propia caja de la cuenta, decorada y con mensaje en su interior.
Es la primera vez que vamos a éste local, pero seguro que volvemos. Todos los platos que sacaban al resto de mesas tenían una pinta exquisita, disponen de una importante variedad gastronómica desde tequeños, gyozas, arepas, papas bravas, tartar, pan bao, poke bowls, sushi, hamburguesas, woks, carnes, pescado... Así que habrá que volver para probar resto de la carta.
Enhorabuena a Santo Chihuahua y a seguir dando tan buen servicio.
El servicio es bueno, los camareros/as son agradables, la comida está muy buena y además puedes disfrutar de la decoración del lugar que es muy chula y diferente. Volveremos seguro!
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