Burno pues nos encantó. Paramos por allí y tiramos de las reseñas pero este lugar no tenía demasiado buenas pero la hora y las vistas nos hizo arriesgarnos. A primera vista de la carta parecía cara pero luego el camarero nos hizo recomendaciones sobre el precio de pedir la mitad y luego nos paró cuando vio que ya habíamos pedido suficiente comida. Todo estaba bastante bueno y pagamos buen precio. Buen servicio y rápido. Para aparcar hay que hacerlo en la playa
Este restaurante es ideal para tomarte una caña y una tapa o una ración, para comer como ha sido nuestro caso no lo recomiendo tanto. Está en una ubicación privilegiada con unas vistas muy muy buenas. Nosotras reservamos para comer, éramos 6. La única mesa reservada en toda la terraza y la única mesa que estaba al sol. Las dos camareras que estaban atendiendo la terraza no nos dejaron mover las sombrillas ni cambiar de mesa. Eran o muy amables o muy bordes según el momento, no puedo explicarlo mejor y esto hace que la experiencia global disminuya bastante. En cuanto a la comida, en nuestro caso nos ha gustado mucho la tortilla, los mejillones, las rabas y las sardinas aunque eran pequeñas. Las raciones son pequeñas.
Es una taberna en el puerto de comillas, con unas vistas increíbles, creo que es lo mejor que tiene el bar, tomar una cerveza con esas vistas es privilegiado!
La comida no está mal, la ensaladilla muy corriente, las rabas parecen de calidad, y los bocartes aprobado.
El servicio no es un 10 pero he de admitir que para la terraza que tienen las chicas lo sacan bien, les haría falta una persona más de apoyo en mi opinión.
Los precios un poco elevados para mi gusto, pero bueno.
Un detalle negativo es que pedimos bigaros y muchos venían vacíos...
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