Fuimos con reserva a comer para dos adultos y dos niños, a la hora de la llegada te sientes como si estuvieras en casa puesto que la atención fue muy buena por parte de los trabajadores, el ambiente es muy tranquilo.
Pedimos de entrada croquetas de jamón que creo que son bastante mejorables en cuanto a sabor y textura ya que al ser croquetas muy grandes se quedan muy compactas.
Después una fabada bastante buena con embutido de mejorable calidad y un cachopo de matanza que estaba bastante bueno, patatas naturales como debe de ser y punto perfecto entre rebozado y carne.
Para terminar pedimos tarta de queso que estaba un tanto dura de textura, de sabor bien.
Lugar recomendable por su atención, volveremos para seguir probando otras cosas de su variada carta ya que vimos salir algunos platos sobre todo de pescado que tenían muy buena pinta.
Es un sitio agradable y con muy buena comida a un precio razonable. Servicio cercano y amable. Hemos pedido el menú del día y ha estado muy bien. Ya volveré a probar su carta. 🤩🤩
Fue una experiencia estupenda, nos hablaron de este sitio y fuimos a probar.
La atención estupenda, a pesar de que fuimos muy tarde.
El local muy limpio y acogedor.
La comida excelente, todo riquísimo.
Lo mejor, un picadillo de setas con cabrales,nunca lo había probado y es de lo mejor que he comido en tiempo.
El entrecot muy rico, los Gambon es enormes y muy buenos, el secreto excepcional.
En definitiva todo buenísimo.
El precio, pues en relación a la cantidad y calidad, bastante bien.
Volveremos.
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