Siempre que vamos a la costa mediterránea de viaje, paramos para descansar y comer en este lugar. Nunca nos defrauda y está muy bien respecto al resto de restaurantes que hay por la zona (en mi opinión, este es el mejor). La última vez que hemos ido, me ha dado la impresion de que el local lo han mejorado bastante. Los baños los veo impolutos, no hay casi ninguna mosca (a comparación de antes) en las macetas que tienen dentro del comedor... El servicio del personal es bueno, atento y rápido. Nos prepararon la mesa y nos tomaron nota de lo que queríamos en seguida. Los platos no tardaron en llegar y estaban calientes. Hablando sobre la comida, la calidad-precio acorde al menú es muy buena. 11€ por dos platos, postre y bebida (que puede ser hasta vino) está muy bien. Además, te ponen ensalada para compartir, que es variada ya que no lleva solo lechuga como en otros sitios (lleva también tomate, aceitunas, cebolla...). Los spaghetti a la carbonara son muy buenos y con varios trozos de jamón, aunque les falta poner aparte el queso rallado por si quieres echárselo y ya serían de 10. La pechuga de pollo es muy jugosa y blanda, como ha de ser. Además, viene acompañada de patatas caseras que, en mi opinión, están mejor que unas patatas fritas que ponen en todos los sitios, ya que no te cansan y pegan muy bien con el plato. El café como en cualquier otro lado. Recomiendo venir a este restaurante si eres de Chinchilla o si pasas por allí. Si podéis llevaros miguelitos de La Roda, no dudéis y hacedlo. Elegir los de chocolate blanco porque están muy buenos.