La iglesia arciprestal de Santa María de la Calella actual es un edificio de estilo neoclásico, construido a partir del 1747, cuando cayó el campanario y derrumba la iglesia anterior, y ampliado en 1785 según planos del maestro Moretó de Vic. El antiguo edificio fue construido el 1543-1564, y de él se conserva la gran portada de entrada de estilo barroco. En la fachada aparte de la portada de entrada hay sobre mismo un rosetón y un ojo de buey, en la parte izquierda y un poco atrasado en relación con la línea de la entrada está el campanario de planta cuadrada para terminar en un polígono. La planta de la iglesia tiene forma de cruz latina, de una nave de 49m de largo, con crucero y ábside poligonal sigue modelo barroco derivado de San Felipe Neri de Barcelona. Cinco tramos de bóveda tiene la nave, con dos de desiguales, los brazos del crucero; la intersección de este es cubierta con una cúpula semicircular. Entre los contrafuerte s de la nave central se abren cuatro capillas a cada lado. El templo es iluminado por la rosetón grande de la fachada principal y dos ventanas (posteriores) a cada lado de la nave. La iglesia se completa con un campanario de 42m de altura de base cuadrada, con cuerpo superior octogonal. La portada de estilo barroco está colocada en la fachada principal de la iglesia de Santa María de Calella. Después del derrumbe, al caer el campanario en 1747, de la antigua iglesia únicamente queda esta portada. Tiene incorporados doce cabezas de los apóstoles esculpidos por el cantero Jean de Tours en piedra numulítica, está dedicada a la Asunción y San Nicolás de Bari y fue restaurada después de las destrucciones sufridas en 1936. aparte de las cabezas de los apóstoles hay otros motivos decorativos esculpidos, además de una hornacina con un santo.