Tuve una experiencia excepcional en Cape Nao del Meliá Cala Galdana. Probé la pasta con bogavante, que a pesar de su precio de 40€ por plato, resultó ser deliciosa y sumamente satisfactoria. La porción era tan generosa que fácilmente podría haber sido compartida por dos personas. Además, las vistas desde el restaurante eran simplemente impresionantes, lo que añadió un toque especial a la velada.
Restaurante del hotel Meliá Cala Galdana, el trato fue increíble, ya solo eso merece la pena la visita, Álvaro, Cabezuelo y Borja nos trataron casi como familia. La comida, buena, aunque esperábamos más! El postre merece mención aparte, muy bueno.
La ubicación espectacular, en plena playa Galdana, con muchas terrazas de distintos tipos, a la entrada una vitrina con el pesado fresco de la carta y fuera de ella, la chica de la recepción encantadora en general tido el personal, nos cambiaron la mesa de dentro a una de las terrazas nos arriesganamos por el tiempo pero no pusieron inconvenientes, Juan el camarero que nos atendió nos ayudo a elegir cosa que no pasa casi nunca, nos recomendó para no pedir demasiada comida, muy atento en todo momento sirviendo vino y pendiente de nuestra mesa.
Las croquetas nos dejaron cambinar las de dos tipos, increíbles de buenas, los huevos rotos con carabinero delicioso un plato muy tipico con un puntazo de saaabor, el pulpo a lo mejor sí sería recomendable o aconsejable cambiar la patata que lo acompaña, queda demasiado sencilla e insulsa para el productazo principal.
El pijama súper bueno refrescante y ligero..
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