El local es precioso y cuenta con una ubicación privilegiada; además de la buena comida, un servicio muy atento y simpático, está a 3 min del mercado de la Boqueria y a 1 del MNAC. Precursores del brunch en Barcelona.
Me encanta comer o tomar algo en el dos trece. Por arriba encontrarás un local minimalista, abierto, luminoso con vistas al Raval, Carrer del Carme.
Los menús son de buena calidad, con diversas opciones, variados un buen precio, sabrosos, de cocina de mercado y algo de fusión.
El concepto del lugar es excelente. Es posible realizar Brunch y tienen opciones vegetarianas.
El pan es casero y delicioso.
Además sirven tapas exóticas como bravas con salas muy particulares.
A la noche puedes relajarte en la intimidad de su sótano. Soy cliente desee hace al menos 8 años, he visto como cambian los sofás y las mesas de lugar en mil ocasiones
Los cócteles buenos y la sala dinámica. Son muy activos jovial es y alegres. No he llevado a nadie que no haya quedado contento.
Este restaurante de tapas tiene un ambiente tranquilo y casi romántico.
Hay velas en las mesas y la luz es tamizada.
El gazpacho es refresco y muy rico, con trocitos de verduras.
Las patatas bravas son originales y se sirven con una salsa a base de kiwis, una delicia !
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