Las fotos no hacen justicia, pero os aseguro que es nuestro lugar preferido para cenar en Badalona. Empezamos por las bravas que son espectaculares, caseras y con una salsita bien picante. Siempre nos pedimos butifarra negra o txistorra, con quesito y el pan con tomate, y es que no falla, ¡ah, y que no falte el xampanyet!
Además Salva siempre nos recibe con mucho cariño, el trato es inmejorable, siempre que tenemos visita los llevamos a conocer el sitio.
Era la primera vez que iba a este restaurante, se encuentra ubicado en el casco antiguo de Badalona, si lo ves por fuera no piensas que puede ser un restaurante de esta categoría, una pared pintada toda de blanco y donde debería ir el nombre del restaurante pintado todo verde, muy dudoso la verdad. Entrando en tema de comida, muy bueno todo la verdad, buenísimo, todo hecho con carbón que lo ves tu en todo momento, la cocina es abierta. Fuimos cuatro personas, pedimos unas bravas (no están en carta, ya te lo dicen), cuatro butifarras de sus respectivas clases (tienen mucha variedad de butifarras), queso fundido por encima que es un extra en el precio y sus respectivas bebidas unos 53€ de precio. Bastante bien la verdad. Lo recomiendo y seguro que volveré.
Creo que han cambiado de dueños pero el hombre que nos ha atendido ha sido muy simpático y eficiente.
Todo está muy rico sobretodo los bocadillos calientes de carne con el queso fundido, las croquetas caseras y escalivada....
Calidad, cantidad precio ideal.
La tarta de queso demasiado dulce para mí gusto... Pero por lo demás muy bien.
Volveremos seguro.
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