Increíble restaurante en Bulnes situado en un lugar perfecto al lado del rio que atraviesa el pueblo. Este restaurante nos dejo sin palabras tanto por la cantidad, calidad y el precio. Aquí podrás degustar los platos clásicos de la gastronomía asturiana con un precio y cantidad excepcional de los platos.
Nuestra recomendación es preguntar antes sobre la cantidades de los platos porque en nuestro caso de una ración de fabes podían comer 3 personas.
El único defecto que encontramos es a la hora de conseguir una mesa. Es un sitio donde no hacen reservas y te dan sitio en orden de llegada. Nosotros tuvimos que esperar 1 hora hasta que nos sentamos. Normalmente a partir de las 15h hay sitio.
Es el último de los bares segun llegas a Bulnes. Amplia carta, raciones grandes a precios acordes al encanto y la inaccesibilidad del lugar. Camareros simpáticos, amables y esmerados. La comida muy buena.
Buen lugar para comer después de hacer la ruta a pie desde Poncebos. Buena cantidad de comida, pero algo lentos en el servicio.
No reservan para comer, así que si queréis comer ahí id sobre las 13h, ya que es cuando empiezan las comidas.
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