Un auténtico y gran descubrimiento. Un sitio cuco en Alpedrete. El local no es muy grande pero es muy acogedor, el servicio excelente. Y la comida muy muy muy rica, pidas lo que pidas se acierta con todo.
Recomendable si vais por la zona.
Tomamos menú del día. Ya hace años que la bebida no está incluida en el precio del menú, con dos tintos de verano el precio salió por 32€.
Recuerdo que antes había más variedad de platos, esta vez solo había para elegir entre 2 segundos, boquerones o arroz con solomillo ibérico y guisantes. Últimamente encuentro un exceso de pimentón en el arroz, mas que darle sabor al arroz con el caldo lo dan con el pimentón.
En este caso, la presencia del solomillo era testimonial, unos cuantos dados de apenas 1 cm. de lado, arroz suficiente, pero eso no es lo que esperábamos.
Los primeros estaban bien y los postres también, la tarta de zanahoria muy buena.
Seguramente volvamos a ir, ya lo de pedir arroz no creo que repitamos.
Bueno hemos comido allí de casualidad y la verdad que el sitio no está mal aunque podrían mejorar en muchos aspectos. El servicio ha sido un poco lento, la comida estaba buena, aunque siempre se puede mejorar, el punto del arroz estaba bien aunque soso de sabor, la tarta de zanahoria estaba pasada,el bizcocho súper seco y no sabía a nada. Por lo demás correcto.
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