El restaurante tiene un diseño minimalista y contemporáneos con esculturas modernas, la estética un 10. Luego fuimos un miércoles sin reservar y nos pusieron una mesa. Pedimos la bebida y nos pusieron un aperitivo de variado de frutos secos. Escogimos menú del día y se podía elegir entre 3 primeros y 3 segundos. El primer plato escogimos lasaña casera y estaba riquísima y los Segundos cada uno uno, y el postre una miloja de pistacho con nata y fresas, espectacular el postre tambn! Es servicio por parte de los camareros espectacular, la comida la sirvieron súper rápido y muy atentos siempre, en especial dar las gracias a Mireya (creo q se llamaba) por lo simpática que fue y porque atendió a otros comensales en inglés, hablando y desenvolviéndose perfectamente. Por último por poner alguna pega, no nos dieron la carta para poder mirar lo q había o un código QR, con lo q pedimos el menú del día pero no sabíamos lo que costaba, ni lo q entraba hasta el final. El precio del menú es de 14€ por persona con primero, segundo, postre y café. Aunque en el menú no entra ni la cerveza sin alcohol ni el acuarios de limón, solo entraba el agua. Un 10 de restaurante muy recomendable!!!