Nos desviamos de la carretera solo para comer porque habíamos visto las reseñas positivas.No defrauda. Un sitio con trato excelente por parte de su camarero que te explica con paciencia cualquier duda,unas vistas maravillosas, ambiente muy agradable y comida muy bien elaborada. Volveremos seguro a pesar de no tenerlo precisamente cerca, merece la pena.
Fantástico lugar por la ubicación, sus vistas, la atención y la calidad. Con menú elaborado y asequible. Pedimos de carta pues nos apetecía probar y la verdad que el resultado muy bueno.
Croquetas caseras. Carne sabrosa. Vino exquisito. Recomendado. Aunque tengas que desviarte algo de la autopista vale la pena hacer la parada. Y si vas con niños, tiene zona para que jueguen.
Fuimos un grupo, recomendación de una amistad en común, nos atendieron bien, aunque Con algo de descontrol, éramos 2 mesas y no controlaban demasiado lo que era para una o la otra mesa. El menú, nos lo mostraron, cuando todos estábamos ya decididos y nos vinieron a tomar nota, nos cambiaron los primeros. Nos quedamos un poco descontentos.
La ensalada de tomate, queso y anchoas, muy buena, el revoltijo de espinacas con queso, demasiado caliente, no se podía tomar tal cual llegó a la mesa, los segundos, lo mejor, la paella, con verduritas y alcachofas muy buena. Los postres no estaban nada mal, pero nada espectacular. Algunos que pidieron un carajillo con "quemadito" alabaron al chef.
El menú, pese a que es algo elevado, la calidad está bien, el tema que no entre la bebida, no me acaba de gustar, almenos un refresco o agua debería entrar por 15 euros en un menú. Las vistas muy buenas, pero no justifican por ellas solas el pasar por allá. Si pasas cerca, recomendado, hacer la excursión hasta allá, quizá no hace falta.
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