Calauela

Una grata sorpresa en este bonito pueblo, muy buena comida a precio asequible; a tener en cuenta: 1) imprescindible reservar a pesar del amplio comedor 2) espectaculares el pulpo, la sepia y el coulant de chocolate. Pero los demás platos no desmerecen, con razón la reserva 3) servicio atento y correcto y ubicación acogedora para la terraza 4) imprescindible subir al castillo (10 minutos andando) y callejear por las hermosas calles del pueblo

El día 21 de mayo fui a comer y vi que ha cambiado de sitio y dueña y cual fue mi asombro que la comida no era de calidad y mal cocinada, ni un huevo frito me quisieron hacer con el embutido y las patatas. El postre una birria de cuajada,tamaño mínimo y sin sabor. Esto y unas bravas y sepia compartida con 4 personas, 25 € sin siquiera un mantel de papel. Para no volver

Muy buena comida de menú. Ensalada de tomate con huevos fritos, calamares con romesco y croquetas de bacalao de entrantes para compartir. Además hemos pedido una ración de croquellanas muy buenas. Los entrantes muy buenos. El único pero, las croquetas de bacalao un poco aceitosas. De segundos: entrecot y lagarto de cerdo ibérico. Muy buenas las dos cosas. De postre hemos pedido tarta de queso (al horno) espectacular. Dos tercios y una botella de vino local (XALAO), muy bueno. Todo por 62€. Un precio más que razonable. Para repetir.

Un restaurante muy agradable. Los fines de semana tienen un menú a 18 euros con tres primeros: ensalada de tomate con huevo frito, buñuelos de bacalao y calamares con salsa romescu y un segundo a elegir. Los postres son caseros. Todo buenísimo y de calidad. La atención y el servicio es inmejorable: las chicas muy atentas y agradables. Relación calidad-precio excelente. Muy recomendable.