Noviembre 2023
Fuimos 2 adultos y 2 niños.
A pesar de indicar en la reserva que nos gustaría que nos pusieran en las mesas que hay al entrar al salon en el reservado de la izquierda, no lo hicieron pero nos pusieron en el reservado que había al final a la derecha. Estuvimos fenomenal! Los camareros fenomenal aunque me gustaría que hablaran un poquito más alto ya que con la música casi no lo entendía.
Las croquetas de bogavante, los tacos, el trio de molletes y el secreto estuvieron genial. El tiramisú perfecto pero el brownie para mi gusto demasiado duro y seco.
El ambiente con la música estupendo.
Buen menú de mediodía (18€). Muchas y diferentes opciones, con raciones generosas. Servicio correcto cuando no hay mucha gente, después se hace caótico. Decoración muy chula!
Lo tenía apuntado desde hace meses para probarlo y por fin fuimos ayer con unos amigos. Y nos gustó tanto que me levanté durante la comida y reservé otra mesa para el día siguiente, porque por la web me ponía en lista de espera, y tuve suerte y me buscaron hueco. El diseño del local es sensacional, y la comida está a la altura, recomiendo ir con gente para compartir y probar distintos platos. El precio nos sorprendió para muy bien porque salimos a unos 35€ cada día, habiendo pedido con alegría, pensábamos que saldríamos a unos 45-50€ y no fue así. Lo que sí mejoraría es el servicio, los dos camareros de los dos días salen corriendo a veces sin que te de tiempo a acabar de pedirles algo y se lo tienes que pedir cuando vuelven, haciéndoles perder más viajes. También es un local grande con mucha decoración y muchos puntos ciegos para que te vean bien, serían recomendables botoneras en las mesas para solicitar un camarero o pedir la cuenta. Pero volveremos unas cuantas veces más, tengo pendientes las croquetas líquidas, la carne esa con romero que huele brutal, y algunas cosillas más jeje
La verdad me invitó una amiga a festejar si cumpleaños y realmente lo pasamos tan bien. El ambiente es espectacular. La noche fue increíble y nosotras no éramos unas crías con lo cual he de decir que se puede ir de todas las edades porque el hambiente era idóneo para poder disfrutar.
Comimos muy bien. El personal estuvo atento en todo momento y a todo detalle.
El restaurante está muy bien ubicado y no tuvimos problema para aparcar aunque si suele haber dificultad en esa zona. Cuando llegamos enseguida nos atendieron y nos sentaron a pesar de que llegamos 20 minutos antes de nuestra reserva. El lugar está muy bien decorado, el espacio es amplio. Los camareros en todo momento fueron muy amables con nosotros y nos sirvieron con rapidez. La comida está buena pero sin mucho más que añadir.
Es un lugar al que ir alguna vez para probarlo pero si volviera sería sólo de forma esporádica.
Un lugar donde relajarse a la hora de la comida.
El personal muy atento y educado.
El menú del día es bastante económico, si que he de añadir que si eres un poco "especial"para comer dicho menú no es para ti. La carta es correcta y con variedad de producto y precios muy competitivos.
El jefe de sala muy atento con y para sus trabajadores.
He de añadir que las patatas fritas estaban bastante pasadas de fritura y estaban muy duras...
En el postre nos encantó la tarta de queso, diría que está en mi TOP 5 DE MEJORES TARTAS DE QUESO.
Por añadir algo falta un cambiador para bebés en alguno de los cuartos de baño ya que no disponen de ninguno.
Restaurante bien ubicado y próximo al centro de Valencia.
Posee una gran variedad en su carta tanto de comida, postres, como de vinos.
La decoración es excelente desde la entrada hasta el salón principal, muy buen ambiente e iluminación.
El sensación durante la cena en nuestro caso ha sido muy agradable, con no demasiada luz y buena música.
Una lástima no habernos podido quedar más tarde a tomar una copa, queda pendiente para la próxima.
Vale la pena visitarlo tanto por su decoración como por su comida.
Buena relación calidad-precio.
Para repetir.
El lugar es muy bonito y vale la pena ir a verlo, muy de ambiente y muy bien decorado. El servicio también muy bien y muy rápido. La comida es buena y pague lo que me esperaba (30 euros por persona, entrante, plato, postre compartido, copa de vino y agua). Lo único es que me parece que hay muchas mesas/estamos todos muy juntos, a lo mejor era por el sitio donde estaba (porque luego vi que habían mesas, más grandes, que estaban más apartadas), pero me enteré de toda la conversación de los de al lado.
El restaurante es precioso, tiene una decoración y unos techos altos que te dejan boquiabierto. La atención fue muy buena, y la carta es variada con algunos toques distintos. Lo que más nos decepcionó fue el ceviche, plato pequeño para el precio que tiene y sin sabor, el resto todo delicioso; la croqueta líquida deliciosa y la tarta de queso de las mejores que he probado. Luego pasa a ser pub, si eres de los primeros turnos el ticket te sirve como entrada, aunque para nuestro gusto la música era demasiado electrónica. Está bien para ir en alguna ocasión especial, a nosotros nos gustó.
El restaurante es precioso. Muchas plantas, pantallas con imágenes de cascadas en movimiento, música de fondo... La atención de las camareras fue muy buena. La comida es original y está buena aunque tampoco muy sorprendente para el paladar, al menos lo que probamos. Las gyozas las he probado en sitios mejores. La croqueta líquida estaba muy buena y arroz no estaba mal. Muy original y bonito donde te la sirven. Sobre los postres, para los amantes del chocolate, el brownie es ideal. Pero yo preferí la crema mediterránea. Elegimos el menú del mediodía.
El restaurante la diva tiene una decoración de 10, los platos estaban muy ricos, cuando se empezó a llenar a la hora de la cena la atención de los camareros fue algo lenta ya que nos trajeron los platos muy rápido pero la bebida no llegaba. Por lo demás lo pongo como un sitio para visitar al menos una vez en tu visita a a valencia sobre todo por la decoración
Estuvimos en este restaurante a medio día y es de lo que puedo opinar, la decoración una pasada, parece como si estuvieses en un jardín, la comida muy bien, relación precio, calidad, os recomiendo de entrante croqueta líquida o gofre de patata y de principal, canelones, solomillo al pedro ximenez o bien torikatsu, el postre increíble ya sea brownie o crema mediterránea que es lo que nosotros pedimos. Los baños súper originales, bueno, más bien los lavabos.
Lo único negativo es que el camarero que nos atendió era demasiado serio/antipático y la camarera mas o menos del mismo estilo, nos servia los platos en las manos, todo lo cual estropea un poco el local.
Nuestras expectativas eran altas, y aunque en algunas cosas flojean, en general, está bien. La comida, exceptuando algunos platos, está bien. El servicio, podría mejorar, si el que gestiona el local organizase mejor la recepción (es un desastre total) por las colas que se montan, y porque hay un camarero para un montón de mesas asignadas, dejando éstas no perfectamente atendidas (todo esto no es culpa del personal, sino del que gestiona y organiza a la gente). El plato de los noodles, bastante deficiente (mucha salsa). Los demás, croquetas, tacos, carne, está rico y nada que decir. En general, un 8/10. La decoración, top. No es un sitio donde volvería todos los meses, pero sí de vez en cuando.
Rosa Mari Martinez Torres
+4
El sitio es una sala grande muy bonita. Tiene un montón de camareros con uniforme súper atentos, mesas con mantel y servilleta de tela bordados. La comida está muy rica, pedimos el gofre de patata y la ensaladilla que podrían mejorarla un poco. Pero el canelón de pato y los molletes estaban súper buenos. La tarta de queso también podría mejorarse algo. De precio normal. Y luego retiran las mesas y se convierte en discoteca.
Restaurante donde comer muy bien con una decoración muy original y los platos muy bien presentados.
Camareros rapidos en servir para la gente que hay.
Precios asequibles a moderados.
Reservar antes de ir. Suele estar muy concurrido. Lo malo es el aparcamiento.
Recomendable si visita.
Genial local con una decoración muy cuidada, Proyecciones ambientales ,que resulta un ambiente chic y especial.
tuvimos la suerte de contar con DJ durante nuestra comida.
Carta amplia, muy rica y precio muy ajustado.
El único pero, que aunque reserves mesa, probablemente vas a tener que esperar y que el local es muy ruidoso con las conversaciones (quizás haría falta reforzar el aislamiento o la reverberación)
El camarero que nos sirvió fue muy atento y servicial
Totalmente recomendable la visita
Sin duda repetiremos!!
Es un local precioso, me ha encantado, el ambiente es genial, yo fui a la hora de la comida, el camarero que nos atendió muy bien también, la comida llega enseguida, los postres tardaron algo más, no son platos muy elaborados ni muy generosos pero no están mal. Casi lo que menos me gustó fue el postre, volveré por lo bonito y agradable que es.
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