Se nota que es cocina con amor.
Platos con sabores que se complementan perfectamente como naranja, hinojo y bacalao o gnocchis con calabaza y avellanas. Delicioso.
El postre riquísimo.
La decoración tan simple casi minimalista del local donde destaca la imponente lámpara roja, no desvela qué tipo de cocina te espera. Fue una sorpresa muy agradable.
No encontré nada negativo.
La atención inmejorable.
4 platitos y un postre, 14,50€.Bebida no incluída.
Es el menú único que ofrecen durante la semana, y que varía cada día. Si te gusta degustar la cocina creativa a un buen precio en un espacio acogedor y con muy buena atención, esta es una oportunidad. En pleno centro de la ciudad, al lado de la Plza de la Virgen . Un placer
Cocina fusión a muy buena relación calidad-precio. Personal muy amable con toque único en cada plato. Menú estilo degustación. Increíble la mayonesa de kimchi!!
Restaurante pequeño y austero por dentro, camarera muy amable y simpática. Hubo controversia con algunos platos ya que a unos nos gustaba unos y a otros, otros (en fin para gustos los colores).
Lo que nuestro paladar notó mucho fué el cilantro para nosotros era muy fuerte aunque en la mesa hubo gente que le gustaba este sabor.
A mí por ejemplo la fideguá me gustó mucho.
227-1-2016. Pedimos menú del día por 14,50, bebida a parte. Fueron 4 platos fijos, no se elegía ninguno. Variado y bien cocinando. Ambiente agradable y servicio atento.
4 personas/76€, menú cerrado con platos muy elaborados con combinaciones sorprendentes. La ensaladilla de bacalao estaba estupenda, pero todos los platos son geniales. El trato de Katina también. Cuando está Paco Parreño, el cocinero que habitualmente está en la Nacional, es una delicia. Hay que ir con reserva.
Celia Rodríguez Alarcón
+5
El menú increíble. Muy elaborado y exquisito. Lo mejor también el atento y agradable trato de sus dueños. Un lugar muy recomendable
Me ha encantado. Muy bien trato al producto en todos los platos, bien combinados y con mucho sentido. Un menú semanal genial (y económico) teniendo en cuenta la calidad del servicio que ofrecen. Un trato estupendo, además, de l@s camarer@s.
Pequeña joya con encanto. Délicat es un pequeño restaurante con sala (10 mesas) y terraza, de precio muy ajustado (14,50 el menú de 4 platos y postre), servicio rápido y agradable, y elaboraciones muy trabajadas, frescas y originales (crema de guisantes con hierbabuena, mojete murciano con ventrescas, etc.) Todo un tesoro para descubrir y repetir.
Nos ha encantado todo. Desde el trato hasta la comida. Ofrecían un menú cerrado con el que te quedas más que bien. Todo buenísimo! Una mezcla fusión que no te esperas al entrar por la puerta. Es una pena que el local no esté decorado más bonito, es un poco austero, aunque supongo que es parte de su esencia.
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