Un restaurante sin pretensiones, de los de toda la vida, con brasa a la vista y servicio cercano y cordial. Ambiente de pueblo y platos sencillos pero bien elaborados, con excelente relación calidad-precio. Especialmente amable y agradable el trato de la camarera, te hace sentir en casa.
Restaurante que se encuentra a la entrada de Ucero. Calidad precio de diez. Precios muy asequibles y calidad muy buena. Los platos son contundentes. Servicio muy bueno y rápido. Lo recomiendo
Un restaurante tradicional con un aire rústico que me encanta,la comida riquísima,en especial las carnes con ese sabor tan característico que le da la leña de encina. Por ponerle un pero, falta personal para atender la gran afluencia de gente en fines de semana y festivos que hace el servicio lento durante estos días.
En el centro de Ucero, pequeño restaurante construido pegado a la roca, con producto de la tierra a precios realmente competitivos. Recomendable platos de temporada como setas o el menú de carne de lechazo o chuletón con entrantes por 39 € para dos.
Buena comida y buen ambiente.
Los chipirones a la plancha riquísimos, el chuletón espectacular, la leche frita recién hecha y del pan solo puedo decir que he comprado para cenar.
Gracias! Amenazamos con volver 😉
Juan Salvador Martí Piquer
+4
Gran relación calidad precio, excelente comida, variedad, buen servicio y personal muy atento y amable.
El restaurante muy normalito,el servicio muy bueno y la comida excelente. La única pega que dentro hay mucho humo de la parrilla y sales ahumado total. Aún así es muy recomendable
Alberto Jimenez Marquez
+5
Comida muy buena y buen servicio. Necesaria reserva. Un poco de calor en el comedor del fondo. Menú de lechazo por 46€ ( mejorado a paletilla por 3€ más )
Restaurante construido pegado a una roca en el pequeno pueblo Ucero.
Es pequeñito por lo tanto recomiendo reservar.
La comida es muy buena, carnes de la zona y bien echas al carbon.
Si estas por la zona recomiendo pasen a comer o cenar.
Maria Jesús Sanz Laguens
+5
Comí menú de lechazo por 46€ dos personas. El lechazo muy bien y las leches fritas muy buenas. Tienen dos turnos de comida a 13:30 y 15:30. Fuimos al último pero habíamos reservado antes el menú. Estaba lleno y había alguna mesa larga de celebración bastante ruidosa. Muy recomendable para reponer fuerzas después de caminar por el cañón del río Lobos.
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