Tooooooooodo es delicioso, las palmeras son palmerones y la calidad es excepcional, casi siempre hay fila para entrar pero vale la pena... Las chicas son majas a pesar que muchas veces están agobiadas.. Si estas de paso o cerca tienes que hacer una parada y probar uno de sus dulces...
Entrar aquí es un placer a los sentidos, cualquier dulce que te guste aquí te gustará más.
Como entres con hambre estás perdido porque te llevas la mitad de la tienda.
Son amables y atentos. Y te explican con detalle loqnue necesites.
Exquisitos los cojonudos, las palmeritas, las tartas, las trenzas, el pan....no sabría decir si algo no está riquísimo. Esa es la verdad.
Compres lo que compres será un éxito seguro.
Parad y admirad para luego degustar sus exquisitos dulces... Las palmeras de hojaldre divinas y sus bizcochos deliciosos. Nada desmerece en este lugar
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