Han cambiado de dueños y la verdad que el sitio lo han dejado fenomenal, esta muy aprovechado y además se puede picotear algo, hemos ido a cenar con unos amigos y hemos quedado contentos, calidad precio correcto, a destacar la costilla a baja temperatura que estaba muy rica y sabrosa, la sangría te la preparan allí mismo y hacia tiempo que no probabamos una sangría tan buena, hacer mención especial a la camarera rubia quien fue quien nos la hizo dos veces porque repetimos de lo buena que estaba. Ambiente agradable y además cerca del mar.
Lugar agradable y acogedor, en un entorno precioso. Recientemente remozado. Ideal para tomarse unas cervezas, unos vinos, un vermut... o cualquier otra cosa. Para comer tiene una selección de raciones típicas de la zona (las rabas muy ricas) o una variedad de pizzas italianas, empanadas argentinas y tacos, burritos mejicanos.
Sitio muy recomendable.
Vuelta en bici y parada obligada. Birra fría y buena cocina. Felicidades 💪
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